Análisis critico de medios.

El reto de esta semana es explicar que hicimos en la clase de gran grupo del pasado miércoles, tras una explicación del final del tema, hicimos unas actividades para concluir. 

La primera actividad fue, decir que adjetivos tantos positivos como negativos nos venían a la mente al ver un objeto, además este objeto sería el que caracterice a una persona. El primer ejemplo lo puso la profesora, Rosa, que mostró un pendiente de aro, dijimos adjetivos desde presumida hasta materiales, y después ella explicó que no todos esos adjetivos le definían. Tres compañeros más dijeron un objeto que le definía y volvimos a decir muchos adjetivos, y nuevamente nos dimos cuenta que esos adjetivos, no son con los cuales ellos se caracterizan. 

En este reto teníamos que decir cuál es el objeto que nos define a nosotros y explicar cuáles son los adjetivos que pueden proporcionar las personas al verlo. 

El objeto que me identifica es mi móvil, suelo tenerlo siempre encima a pesar de que me gustaría dejar de tener esta costumbre ya que a veces puedes perderte muchas cosas de tu alrededor, por estar mirando la pantalla del móvil. Creo que se me podría identificar como alguien materialista, impaciente, ya que no aguantas si conocer que pasa en el mundo más de media hora, y algo introvertida, ya que el móvil ayuda a abrirse a esas personas que quizá les cuesta más. Quizá algo materialista si soy, pero solo con ciertas cosas, impaciente es cierto que sí, no puedo estar ni un minuto esperando algo, tiene que ser todo “aquí y ahora”. Pero para nada me considero una persona introvertida, soy bastante social, me gusta mucho estar con mis amigos y conocer gente nueva. 

Como adjetivos positivos diría, actual, informada y adaptada, estos adjetivos sí podrían definirme, ya que intento estar siempre a la orden del día y conocer todas las noticias de mi alrededor, y adaptarme a los nuevos tiempos, que últimamente este dispositivo, el móvil, nos facilita muchas cosas en nuestra vida. 

Otra actividad realizada en clase fue un pequeño juego para comparar como cambian las cosas si la comunicación es bidireccional o unidireccional, es cierto que de esto nos hemos podido dar cuenta todo el mundo cuando hemos intentado hablar con alguien con diferentes puntos de vista, si una persona de estas dos, no se comunica es imposible que la conversación tenga un sentido coherente y que ambas partes entiendan lo que se quiere decir. 

En esta actividad participe yo personalmente, una compañera y yo salimos del aula, y después entre yo sola. La actividad consistía en que otro compañero debía de explicarme una foto y yo no podía preguntarle absolutamente nada, y dibujar lo que yo interpretaba de su explicación; como era lógico, mi dibujo no se asemejaba al que él estaba viendo. Después entró mi otra compañera, ella si podía hacer preguntas sobre la explicación, esta vez el dibujo si era igual al explicado. Con esta actividad se demostraba la diferencia de una comunicación bidireccional o unidireccional, además teníamos dos pruebas bastante evidentes.