No somo tan diferentes

Hoy paseando por el centro de Cáceres he visto a un señor mayor con unos cuatro perritos paseándolos, mi sorpresa ha sido cuando he visto que dos de ellos iban andando sólo con sus patas delanteras, las traseras estaban apoyadas en un carro en forma de silla de ruedas. Me ha parecido una de las situaciones más bonitas que he visto en todo este mes. ¡Hay personas que siguen teniendo corazón! 
Me parece imprescindible que existan personas así, que le hayan dado una oportunidad a estos perritos, ya que por lo general las personas los dejarían en la perrera o les abandonaría ya que suponen un cargo para ellos... Pero menos mal que algunos vemos a los animales como cualquier otro ser vivo, los vemos igual que nosotros. ¿Abandonarías a alguien por necesitar una silla de ruedas para desplazarse? Seguro que la respuesta de todos es NO, pero cuando se trata de animales que difieren del humano la respuesta cambia. ¿Son menos por andar a cuatro patas y no hablar? 
Esta introducción me hace pararme en un tema de actualidad, la prohibición de cortar las orejas o el rabo a lo animales domésticos, la cual me parece muy correcta, pero no puedo evitar que me zumben los oídos cuando escucho los comentarios que hacen algunos cargos políticos para defender que este acto no debería de estar prohibido, como que el rabo de algunos perros pueden provocar un "Efecto látigo" que podría herir a alguien. Enlazo aquí la noticia sobre este caso por si alguien quiere informarse.
Creo que todos deberíamos de dejar atrás las diferencias que tenemos con otras especies y pensar que todos tenemos vida, no somos tan diferentes. En este país existen muchas prácticas con ciertos animales que son muy injustas, las cuales pienso que deberíamos de intentar erradicar. No apoyo que haya personas que utilicen a los animales como un entretenimiento, los hay que regalan animales domésticos y cuando se van de vacaciones les abandonan, los que se divierten viendo torear a un toro de lidia, los que desean un perro de cierta raza para exponerlo a peleas callejeras, la explotación de animales como los caballos en competiciones... 
Con todo esto quiero reivindicar que debemos tener más cuidado, y sobretodo más corazón, me encantaría ver más acciones como las de este anciano que me ha provocado una gran sonrisa y sentimiento de satisfacción, que a pesar de todo, de que haya persona que no puedan entender que ellos también tienen derechos y que no paren de poner excusas tales como la anterior del "efecto látigo" u otra muy conocida en España, "Es cultura", hay personas que los cuidan, quieren y nunca les harían daño. Sé que es difícil que todo el mundo habrá los ojos y vea más allá de costumbres e intereses, pero ojala algún día todas las personas piensen igual que este señor. Ojala. 


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